jueves, 25 de octubre de 2007

Amor en dos tiempos...


…Y tus manos se posaron sobre mis pechos desnudos
Y tu boca gigante se tragó mi beso.
Era invierno afuera y verano en el lecho, tú inventaste junto al Amor, el Tiempo.
Mordiste mis labios, los volviste eco de tu boca,
te internaste en mí, carnívoro,
sutil, furioso y decidido
para cobrar todo lo que de amor, yo te debía.
Ardientes nuestros cuerpos, bailaban el placer.
Presos estábamos de la intemperie del deseo.
Bendito seas… en mí habitaron tus tormentas, llovieron bocas insaciables,
llovieron manos, se multiplicaron las caricias.
Besé la vida que el roce de tus caderas le había devuelto a mis entrañas.
Saboreé el amor vestido de carne, erguido desde tu cuerpo.
Te invadí, te amé, abusé descarada, obscenamente del placer de poseerte...
Tú, en mí y yo vertida en ti, y, los dos, en un ciclón febril del universo…
Moribunda estaba yo después sobre tus alas,
volando el vuelo de cada átomo de tu ser en movimiento.
Tendido estabas tú sobre mi desnuda humanidad.
Sé que está bien por hoy…lo sé… pero está sed de ti no se me quita…
Y quiero que desandes otra vez cada parte de mi cuerpo.

4 comentarios:

Jorge Daniel dijo...

¡Oh la la! Excelente post
Nota mental: -primera visita por aquí y serias consideraciones para seguir regresando-
¡Saludos y Abrazos!

3rn3st0 dijo...

¡Caramba! Si hasta se me erizó la piel imaginando semejante entrega y pasión.

Definitivamente soy adicto a éste blog :-)

Saludos lúbricos desde Guanare :-)

Anónimo dijo...

Si no lo hubiera vivido, nunca habría creído posible tanta pasión...

Gracias More por este hermoso recuerdo

More dijo...

Jorge : Saludos y bienvenido siempre.
Ernesto: Me alegra verte siempre, siempre.
Cristián mi querido: qué bueno que lo hayas recordado, qué maravilloso. El sentimiento de gratitud es mutuo.